domingo, 31 de enero de 2016

Indolencia y Pasividad: La receta perfecta para que todo siga igual.

¿Desde cuando hemos adquirido un nivel tan alto de pasividad? Con las condiciones que tenemos actualmente, y con unos políticos tan poco honestos como son quienes nos gobiernan, nuestros abuelos no lo habrían dudado un segundo y habrían puesto barricadas en todas las calles principales de sus ciudades y pueblos. Ahora parece que hablar de cualquier protesta en contra de "lo establecido" es un tema tabú, e incluso si se llega a promover de manera explícita, delito.

Nuestro marco legal se va estrechando, de igual manera que se va introduciendo más terror entre la población para tenerla sumisa y sin salir de casa. Desde pequeños nos meten que la violencia es mala, nos enseñan que con ella no se consigue nada, pero lo cierto es que no es así. Si echamos un vistazo atrás en la historia podemos comprobar como casi todas las pequeñas mejoras que se han producido en la sociedad es porque ésta, cansada de tanta injusticia, se ha levantado en armas para defender sus derechos, su dignidad.

Galicia, una de las comunidades más afectadas por la entrada de España en la UE, la cual condujo a un recorte masivo de determinados sectores de la industria, como los astilleros, parece que sigue ahí, indolente, sumisa. Incluso cuando los canallas que se sientan a repartirse el pastel de todo un pueblo, se quitan las caretas abiertamente con la catástrofe del Prestige, no paso nada. La gente salió a las calles con dos pancartas y un pájaro pintado de negro y con lemas como "Hay que botalos" y creyeron que con eso ya habían cambiado mucho las cosas. Cambiaron de manera tan drástica que el Partido Popular, quien demostró su compromiso con Galicia y sus ciudadanos, la cual gestiono aquella catástrofe ecológica de manera magistral, pues a Fraga, ¡le dió incluso tiempo a irse de caza!.

Pues eso, a lo que iba, el Partido Popular arrasó en las elecciones siguientes con mayoría absoluta en casi todas, por no decir todas, las provincias de Galicia. Parece que un torbellino hubiera pasado por aquí y hubiera borrado todas aquellas espantosas imágenes de la cabeza de los ciudadanos, o alguien hubiera cerrado todos los sobres con superglue, lo único que se me ocurre para justificar esta tremenda incongruencia del destino.



Por ello, he decidido hacer lo que podéis ver arriba. He hecho un video para mi canal, a diferencia de los otros, público, en el que hablo sobre la pasividad. Dicho video lo he hecho mirando por una ventana al pasado gallego, como referente del pasado en el resto del mundo. Cuando aún la gente no era tan egoísta como para morir por los demás, como para sacrificarse por una libertad común o por el bien ajeno. Cuando aún se podía confiar en la buena gente, cuando muchos tratos eran de palabra...

Espero que cada uno reflexione dentro de sí, que cada uno busque esa chispa revolucionaria, esa chispa inconforme con el mundo. Deja a un lado el "pan y circo" con el que te ha sometido este Sistema a su voluntad, y empieza a set tu mismo. Empieza a cuestionar cualquier información, venga de donde venga, aunque la diga el mismísimo Papa. La información ES PODER, algo que ellos saben y por eso quieren mantenerte al margen de ella. Toma conciencia, lucha, pues juntos cambiaremos el mañana.

domingo, 24 de enero de 2016

Corrupción Negra.

Ferrol. a 23 de enero de 2016


Hace no mucho tiempo llegó hasta mis manos un texto de procedencia desconocida dentro de un sobre color cartón. Dicho texto era el manuscrito de una serie de diálogos, con apenas acotaciones e indicativos de escena. Con ellos venía una extraña carta en la que se podía leer claramente que la intención del autor no era que dicha obra fuese representada, es más quería que la conservara en el mayor oscurantismo posible, a fin de que mi vida no corriese peligro.

Considero, que un incidente de tan grandes magnitudes como el que sucedió en estas precisas costas hace más de diez años, requiere por mi parte un ejercicio de valor, por lo que asumiendo dichos riesgos, cuyas proporciones desconozco, he dispuesto hacer público este material, no firmando la redacción de este artículo. Soy consciente que las personas a las que les afecta esto harán todo lo que en sus perversas manos se halle para desacreditar e incluso eliminar este articulo de la tirada de mañana, pero tengo aún por más estima que mi vida a mi pueblo y a esas personas que se desviven aún más que yo por defender un interés común: el fin de las mentiras.

Os dejo con esta poco más que increible "interpretación" sobre lo sucedido los días antes a aquel 19 de Noviembre de 2002 en nuestras costas, no sin antes advertiros de que la veracidad del 100% del mismo no está demostrada, pues el autor no se acordaba de los diálogos a la perfección por lo que puede que algunos elementos del mismo no concuerden con la realidad. También mencionar que el manuscrito es de gran extensión por lo que para no hacer muy largo el presente artículo he seleccionado solo aquellas partes que considero indispensables para el entendimiento de los hechos. El resto está resguardado a buen recaudo en un lugar seguro. A criterio de cada uno queda la interpretación de los hechos que la obra expone:

SECRETARIA FONTES: Llega usted tarde señor Freixo. Le están esperando unos señores con un aspecto más bien tosco, le recomiendo que los atienda sin demora.
FREIXO: Descuide Fontes, seguro que son de Santiago, vendrán a pedirme las cuentas del mes pasado.
SECRETARIA FONTES: No se identificaron como funcionarios de la Xunta señor. Si quiere mi opinión, son sospechosos, tienen un aura de hermetismo extraña. Son tres hombres, dos muy altos y uno mediano. Los dos que son altos visten completamente de negro y portan dos maletines tan negros que parecían sacados de un horno de carbón.
FREIXO: Tranquila mujer, seguro que no portan armas radiactivas dentro de esos maletines. Mientras tanto, ¿por qué no va encargando unos cafés y me tiene preparado el comunicado de las doce?

(...)

(Entré al despacho y aquellos misteriosos hombres estaban ya sentados en el sofá de las visitas. Al verme atinaron a levantarse rápidamente de los asientos, asiendo los hombres vestidos de trajes negros las manos dentro del costado derecho. Al hacerles un gesto de tranquilidad con las manos hice amago de presentarme.)

FREIXO: Me presento, soy...
EMPRESARIO: Ahórrese las formalidades, Freixo. Sabemos quien es, sabemos donde localizarle, y sabemos a que se dedica. (Con un gesto pasivo pero imperante) Siéntese, le prometo que no le quito más de diez minutos.
FREIXO: Perdonen mi falta de cortesía pero, ¿Como saben tanto de mi? ¿Que se yo a cambio de ustedes?
EMPRESARIO: Todo lo que tiene que saber de nosotros es esto (hizo un gesto de elevación con las manos señalando la mesa. Los dos escoltas situaron en ella los pesados maletines y los abrieron, dejando entrever una cantidad indecente de billetes morados situados de forma hermética dentro de los maletines.) Como ve, los dos son exactamente iguales.
FREIXO: ¿Por qué se aparece usted de repente con tanto dinero? Aún no se quienes son ustedes ni que es lo que quieren...
EMPRESARIO: No necesita usted saberlo. Soy una persona con el poder suficiente como para encerrarle en una fría prisión mañana mismo. Pero también soy una persona capaz de llenarle los bolsillos de dinero y el nombre de elogios si atiende a mis consejos. Dentro de dos semanas aproximadamente atravesará sus costas un petrolero, cuyo fuel es propiedad nuestra. Lo único que tiene que hacer es dejarlo pasar.
FREIXO: No entiendo porque tengo que recibir dinero por hacer mi trabajo.
EMPRESARIO: Digamos que... no nos dio tiempo a tener toda la documentación en regla, pero eso es papeleo absurdo, ¿verdad?
FREIXO: ¡Cómo que no tienen todos los documentos! ¡¿Sabe usted el temporal que viene para dentro de dos semanas a nuestras costas!? ¿Sabe usted el peligro que representa que un barco averiado cruce nuestras aguas?
EMPRESARIO: (Con expresión de enfado) ¡CÁLLESE FREIXO! ¡¿Sabe usted cuanto dinero perdería yo y mis asociados si ese petróleo no llega a su destino dentro del plazo!? Da igual... no he venido a perder el tiempo con discusiones absurdas. Confío en que usted sepa lo que es beneficioso para usted y para sus intereses, a fin de que haga lo correcto.
FREIXO: ¡Es igual! ¡No pienso poner en peligro nuestros mares, los animales que los habitan y sus gentes por un puñado de millones! ¡Ni hablar!
EMPRESARIO: (Sacando un papel doblado del bolsillo) ¿Acaso cree que tiene la opción de negarse? (Desdobla el papel y lo pone con fuerza sobre la mesa, cerca de FREIXO) Ya esta untado en esto Freixo. Como ya anticipábamos su negativa hemos realizado una consignación por valor de dos millones. Un incentivo nunca viene mal, pero... ¿Qué cree que diría la prensa de alguien que acepta dinero en negro de un empresario? No me haga enturbiarle su carrera señor Freixo. Piénselo, ¿quiere?.

(...)

(Las últimas dos semanas apenas había pegado ojo. La visita de aquel oscuro hombre, del que aún conservaba el dinero sin tocar un solo céntimo, me había dejado completamente taciturno. No distinguía la realidad de lo que sucedía en mi cabeza. No sabía con exactitud la fecha en la que iba a pasar el petrolero, pero aún en esas me debatía, si dejarle o no entrar en mares gallegos. De repente, sentado en mi despacho, recibí un fax que confirmaría mis peores miedos)

SECRETARIA FONTES: (Tocando la puerta) ¡Freixo! ¡Le ha llegado un fax!
FREIXO: (Encaminandose hacia la puerta)¡Ah! ¿Será pesado el presidente? (Abriendo la puerta) ¡Que brasa que da con los presupuestos!
SECRETARIA FONTES: Me temo que no son los presupuestos señor. Es una carta de la Dirección Portuaria, el registro sobre los barcos que van a atravesar nuestras costas esta semana.
FREIXO: ¡Muchas gracias Fontes! (Cogiendo con avidez la carta) No me pase llamadas hasta nueva orden, estaré ocupado.

(Esperé durante un buen rato con el papel boca abajo para no mirarlo, mientras me decidía a desvelar este terrible miedo que había dentro de mi. Tras meditarlo decidí no tener miedo y leer ese fax tan intrigante de la Dirección. Empecé por donde nunca empiezo, por el membrete, y me di cuenta de que había cambios en el logo de la Xunta que no había apreciado en mucho tiempo. Solo me bastaba bajar un poco más para confirmar esa inquietante intriga de que entre esa lista figurara un petrolero...

(...)

(Apenas recuerdo aquel 19 de Noviembre. Como de costumbre un día gris que ocultaba la belleza del sol se erguía. Yo tenía taquicardias y un convulso dolor de cabeza. Los remordimientos me perseguían, temblandome la mano cada vez que sujetaba una pluma y haciendome recordar la imprudencia que cometí al dar el visto bueno a aquella lista de la Dirección. Temía, y presentía, que mis peores pesadillas durante estas últimas noches se hicieran realidad, que gracias a mi egoismo iba a causar una catástrofe de magnitudes que yo mismo no me esperaba.)

SECRETARIA FONTES: Señor, está García de Portuaria al teléfono.
FREIXO: Pasemelo Fontes, haga el favor (Suena el teléfono y lo contesto) Buenas García.
GARCÍA: De buenas nada Freixo. Está desaparecido.
FREIXO: ¿Cómo que ha desaparecido? ¿Qué ha desaparecido?
GARCÍA: ¡El puto Prestige! Nuestros radares hace más de dos horas que no lo localizan, y tememos que se haya hundido.
(Suena el pitido de llamada en espera)
FREIXO: Lo siento García, tengo otra llamada (aprieto el numeral 2) Buenas, aqui Freixo, de Industria.
TORRES: Nos están llegando reportes de varios puntos de la costa, son preocupantes, hablan de una marea negra.
FREIXO: ¡Esto es un desastre! ¡Y yo soy el último en enterarme! ¡Válgame Dios!
SECRETARIA FONTES: Señor, me han pedido que le informe que el presidente ha conformado un Gabinete de Crisis para dentro de dos horas.
FREIXO: (A FONTES) Dígales que me dirijo hacia allá. (Al teléfono) Tengo que irme a Santiago, parece que el presidente ha formado un gabinete de Crisis. Les mantendré informados (cuelgo).

(...)

PRESIDENTE: Tenemos que transmitir a todos los ciudadanos un mensaje de calma.
FREIXO: ¿Insinúa que no manifestemos que es tan grave lo que pasa que no sabemos que hacer?
PRESIDENTE: No insinuo nada, Freixo. Sabes que se acercan las elecciones y esto no es nada favorecedor para las encuestas.
TURRIÓN: El presidente tiene razón Freixo, ¿sabes el escándalo que se montaría si supieran que hicimos TODOS la vista gorda? Era visible a leguas que ese barco tenía demasiada antigüedad para estar circulando en aguas internacionales.
PRESIDENTE: No he organizado esta reunión para buscar culpables, solo para saber cuales van a ser nuestros pasos. Pero, Freixo, en última instancia la autorización o no de cruzar nuestras aguas por parte de ese barco dependía de tí, ¿verdad?
FREIXO: Si tan culpable soy yo y tan inocentes son todos ustedes, ¿Por qué no me han arrestado ya? Es mas, no voy a ser partícipe de sus partidas de Monopoly, ¡Dimito!
PRESIDENTE: ¡Freixo no seas un niño! ¡No puedes dimitir ahora, Freixo!
FREIXO: ¡O se toman las cosas enserio, o conmigo no cuenten señores! (Abro la puerta y salgo a paso acelerado del recinto)

(Recibo una llamada anónima al teléfono)
FREIXO: Si eres un periodista, te voy a dar la exclusiva: Ya no formo parte del gobierno.
EMPRESARIO: ¿Ya esta otra vez con sus pataletas Freixo?
FREIXO: ¡Ah, que es usted! ¿¡ Lo ve, no?! ¿Ha visto las consecuencias de sus actos?
EMPRESARIO: ¿Fui yo acaso el que le concedí el permiso al barco para que atravesara sus mares? No. Así que le ruego que no descargue las culpas sobre los inocentes. Su conciencia sabe que el único responsable es usted.
FREIXO: ¿No se acuerda que fue usted quien me chantajeó con dinero y con la amenaza de acabar mis días en una cárcel?
EMPRESARIO: ¿Tiene pruebas de lo que dice? Se que no las tiene, por tanto no vaya acusando a personas honradas por ahí, no sea que tenga yo razón y acabe sus días en una cárcel.
FREIXO: ¡¿Cualquier carroñero es más honrado que usted!? ¡¿Sabe en que me voy a gastar su maldito dinero!? ¡En decirles a todos lo que ha pasado de verdad y quienes son los responsables! ¡En conseguir que la gente proteste, se haga oir! ¡En eso voy a gastar ese dinero podrido y ni usted ni nadie podrá impedírmelo (colgué).

(...)

(Todavía no se como pude obrar como lo hice, la verdad es que el dinero es el culpable de muchas de las desgracias a las que sucumbe el ser humano. Aunque yo, no lo hice por dinero, lo hice por miedo. Pese a haber levantado protestas sociales, haber concienciado a la cantidad de personas que me fue posible, haber enviado información a los medios, y haber limpiado mi conciencia, parece que no hubiera hecho nada. Las elecciones pasaron y se alzaron con el poder los mismos de siempre... Los mismos corruptos que consintieron no contar nada, callarlo todo. Para desquitarse me enviaron a mi a una fría prisión, donde he sacado el tiempo necesario para decirle a todo el mundo, que lo que ayudé a divulgar por aquel entonces, es solo una puntita de toda la verdad que se esconde. Verdad que pese a haberme redimido, continúa azotándome la conciencia con los recuerdos, que me hacen sollozar de dolor al pensar, que España es el país del olvido.)